El rey francés Luis XIV (El Rey Sol) era un visionario. Al menos en lo referente a temas de estilo. A mediados del siglo XVII tuvo un ocasional encuentro con un grupo de mercenarios croatas que venían de luchar contra los turcos. El monarca, un tipo peculiar según las crónicas de la época, vio en ellos algo que le llamó mucho la atención: un colorido pañuelo que abrazaba el cuello y que caía elegantemente sobre el pecho y que ellos llamaban Hrvatska. Rápidamente, copió la idea e impuso esta prenda a su guardia real. La llamó Cravette. Había nacido el cromagnon de la corbata. El resto es historia.
La medida clásica de las corbatas varía entre los 7,5 a 8,5 centímetros de ancho y siempre deben de ir en consonancia con las solapas del traje. La regla dice que tiene que coincidir la parte más ancha de la solapa con el ancho de la corbata. Ahora, con la moda de las prendas 'slim', corbatas también, estas pueden llegar a medir cinco centímetros, las conocidas como 'skinny'. El largo, como no puede ser de otra manera, es mucho más restrictivo y, excentricidades aparte, al hacer el nudo la punta tiene que llegar a la cintura. No hay otra (exceptuando Luis Aguilé, por su puesto).
Lo mejor es que estén confeccionadas en seda de calidad y el forro en lana. Es una combinación que nunca falla. Como con otras prendas, cada tela tiene su temporada: lana para invierno y lino para el verano.
LAS MEJORES MARCAS DE CORBATA
Es difícil establecer cuáles son las mejores marcas. Actualmente, muchas firmas de renombre tiene un calidad más que contrastada en su confección. En cualquier caso, te dejamos un pequeño listado con el que siempre aciertas:
CHARVET:
Fundada en 1838, está considerada la primera camisería del mundo pero es reconocida, sobre todo, por sus corbatas. La seda que llega a la tienda es hilada en talleres de Francia, Italia e Inglaterra. Ahí se somete a un proceso especial que le da lustre, fluidez y elasticidad. El duque de Windsor y John F. Kennedy conocían bien su calidad.
DRAKE'S:
El Rolls Royce de la corbata. 100% 'British Style. Raro es un miembro de la aristocracia inglesa que no posea una extensa colección de ellas. Sus creaciones pasan hasta 18 controles de calidad. Corte sobrio para ir sobre seguro.
HERMÈS:
El gran especialista en corbatas. Hechas a mano, se caracteriza por no participar de las modas y mantener si grosor casi desde sus inicios. Las preferidas de la realeza y de los hombres de negocios de medio mundo. Sus precios las convierten en una pieza exclusiva no apta para todos.
MARINELLA:
Con sede en Nápoles es, sin duda, el mblema italiano en lo que se refiere a confección de corbatas. Una casa centenaria que ha formado parte fundamental del fondo de armario de Aristóteles Onassis o el Rey Juan Carlos.
BENSON & CLEGG:
Además de una de las sastrerías más icónicas de Londres, y gran referente de Savile Row, elabora corbatas sólo aptas para los paladares más selectos. Un clásico si tus gustos pasan por los estampados de rayas, su gran especialidad.
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